parece haberse originado en tiempos relativamente recientes en Dinamarca.
De acuerdo con el folclore alemán y danés el Rey de los Elfos aparece como presagio de la muerte, parecido a la banshee en la mitología irlandesa, pero a diferencia de la banshee, el Rey de los Elfos solo se le aparece a la persona que va a morir. Su
forma y expresión le dicen a la persona que tipo de muerte tendrá: una expresión de dolor significara una muerte dolorosa mientras que una expresión pacifica una muerte tranquila. Otra interpretación sugiere que la leyenda dice que cualquiera que toque al Rey de los Elfos debe morir.