Antes de que alguien se confunda, no nos referimos a que el
aeropuerto flote en el aire, sino en el agua. Esa es la idea detrás de
un aeropuerto conceptual de alta
tecnología llamado “
London Britannia Airport” y que estará establecido en el estuario del
río Támesis, en Londres.
La firma de arquitectos
Gensler está detrás de esta propuesta que se espera tenga un costo de nada
menos que $80.000 millones de dólares. Como dijimos, la edificación se
ubicaría en el estuario del ya mencionado río inglés y contaría con
cuatro pistas de aterrizaje flotantes de 5 kilómetros cada una. El acceso al aeropuerto sería a través de un
tren subterráneo de alta velocidad. ¿Y si vas en automóvil? Pues no hay
problema, ya que cerca del aeropuerto, y obviamente en tierra, habrá
tres terminales para dejar nuestros vehículos.
La
propuesta de la firma incluye además algunas modificaciones para el
actual aeropuerto de Heathrow. El viejo aeropuerto sería convertido en
un aeropuerto ecológico y los vuelos en exceso serían enviados
directamente a las pistas del aeropuerto Britannia. Pero eso no es todo,
ya que Heathrow se convertiría también en una especie de ciudad
ecológica con alojamiento para 300.000 personas.
Se estima que se
podrán hacer vuelos las 24 horas del día ya que al estar en medio del
estuario el sonido de los aviones no será un problema. Gran parte de la
energía del edificio se conseguiría por medio de turbinas que se
localizarían en los alrededores del aeropuerto.
aqui