"Cada año se ven más medusas..." Este es uno de los comentarios más
frecuentes entre los bañistas que acuden cada verano a las playas de
nuestras costas. El
aumento global de las poblaciones de medusas es un hecho que preocupa a los turistas e intriga a los científicos. El
aumento de la temperatura del agua y otros aspectos relacionados con la
biología de las medusas
en su vida adulta han sido algunas de las variables en las que se han
centrado las últimas investigaciones. Ahora, un equipo de científicos
liderado por el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados
(Universidad de las Islas Baleares y CSIC) da una vuelta de tuerca y
ofrece otra explicación al problema:
el aumento de infraestructuras humanas como puertos y plataformas petrolíferas favorece la proliferación de estos animales.
Durante su ciclo de vida, las medusas atraviesan la llamada fase de pólipo,
durante la que se reproducen asexualmente y carecen de movilidad. Según
los resultados de la investigación, publicada en la revista
Frontiers in Ecology and the Environment, a los pólipos les gusta especialmente anidar en superficies artificiales tales como
puertos, plataformas petrolíferas, granjas de acuicultura e instalaciones turísticas. En concreto, los científicos detectaron una densidad de casi 20 pólipos por centímetro cuadrado de la especie
Cotylorhiza tuberculata en los ladrillos frente a uno solo de ellos por centímetro cuadrado
anidado en las conchas de ostras vivas y aproximadamente ocho pólipos
por centímetro cuadrado sobre conchas de ejemplares muertos.
Las estructuras artificiales en las zonas costeras están aumentando entre un 3,7% y un
28,3%
anual. "Este incremento está proporcionando hábitats para los pólipos,
lo que podría ser un factor importante para explicar el aumento global
de proliferación de medusas", ha explicado Carlos Duarte, uno de los
autores. Las regiones analizadas pertenecen a
zonas submarinas de todo el mundo entre las que se incluyen Japón, Reino Unido, España y Estados Unidos.
aqui