El paraiso sumergido de Maldivas

El mes pasado os dejaba un post, donde hablaba del Acuario Churaumi Okinawa junto con el video titulado Kuroshio sea que se hizo muy popular en internet. Una preciosa mezcla de música e imágenes submarinas que dejaba al espectador una sensación de relajada serenidad.

Hoy vamos a viajar de nuevo al espectacular mundo acuático de la mano de otro video espectacular titulado "Maldives in red"



Y vamos a realizar ese viaje submarino precisamente en el año internacional de la biodiversidad por una sencilla razón: Maldivas, ese paraiso terrenal en el índico, es uno de los lugares más seriamente amenazados por el cambio climático.

Un delicado sistema natural formado por 26 atolones a tan sólo un metro y poco sobre el nivel del mar que ha visto amenazada su existencia y que llevó incluso a sus gobernantes a plantarse ante la ONU para reclamar por primera vez en la historia que las cuestiones climáticas fueran consideradas cuestiones de Derechos Humanos.

El video "Maldives in red" nos muestra unos minutos de la belleza que esos parajes esconden bajo sus aguas. Realizado por Howard Hall y con música de Shie Rozow es una de las piezas visuales más hermosas que la naturaleza nos brinda.

desde luego churri, que cosas me pones cari , mogollón que me encantaria un viaje de estos y ver toda la peña de pececillos del acuario..

no sé yo ahora que decirte más..entre el sueño y la melopea que llevo no me salen las palabras adecuadas churri

Precioso video Duncan, la cantidad de animales marinos que viven en esas aguas, y la diversidad de color hacen del fondo un verdadero espectáculo.

la musica que acompaña el pequeño documental adorna aún más estas maravillas que tiene el fondo del mar.. :)

Es hora de darnos cuenta que la especie humana es una entre una inmensa diversidad biológica resultado del desarrollo de millones de años en nuestro planeta. La manera en la que nosotros impactamos al resto de la naturaleza es cada día más clara, vergonzosa y preocupante.

Sin embargo, la manera en la que el resto de la naturaleza nos impacta a nosotros es quizá menos perceptible, por lo que tendemos a olvidar incluso lo más básico como es el hecho de que nosotros respiramos el mismo aire, bebemos la misma agua y nuestro alimento proviene de la misma fuente. No podemos seguir siendo tan irresponsables y poco participativos. Consumir productos y alimentos ignorando su fuente o impacto en el medio ambiente ya no es una opción para las personas que contamos, aunque sea, con un mínimo de cultura y consciencia social.